16/06/2015
Mendoza: Por los altos costos, los salones de fiesta trabajan 40 por ciento menos
Fuente: Diario Los Andes
Hoy se piensa dos o tres veces antes de realizar un casamiento, cumpleaños de 15 o, en el caso de una empresa, organizar un evento corporativo, conferencias, capacitaciones o exposiciones. La inflación ha impactado fuertemente en los costos, que aumentaron en el último año cerca del 30%, lo que incidió en el sector de salones que ha visto retraer su actividad en un 40%, aproximadamente, en el último año.
El presidente de la Asociación de Salones de Fiestas y Empresa de Banquetes de Mendoza, Andrés Frugoni, destacó que la baja de eventos sociales y empresariales se advierte desde hace dos años (2013/2014). Para este empresario, los factores son varios por lo que los usuarios deciden dar marcha atrás, ya que “a la hora de sumar costos, el gasto final que toman es muy elevado para las épocas que se están viviendo”.
Coincidió con este panorama Eugenia Brennan, propietaria y directora de Alma Multiespacio, quien sumó que en las últimas temporadas observa un decrecimiento en la cantidad y calidad de los eventos que se desarrollan, tanto en sociales como en corporativos. “En los sociales -continuó- las alternativas que los clientes han encontrado es reducir la cantidad de invitados y hacerlos más simples. En cuanto a lo corporativo la diferencia es que surgen más consultas a último momento y se orientan por algún tipo de solución integral y lo más económica posible”.
En este contexto, Brennan adelantó que en nivel porcentual la cantidad de eventos disminuyeron 35% y a nivel de gastos (descontando la inflación real), los eventos tuvieron una retracción del 40%.
Asimismo, Frugoni también remarcó que otro de los puntos que aparecen a la hora de organizar un evento es que los clientes buscan propuestas o lugares más económicos, por lo que manifestó que aquellos sitios de mayor trayectoria o tamaño son los que más notan la retracción.
Cristián Mikyna, socio del salón Lola Mora, añadió que la baja se percibe aún más en los eventos corporativos que sociales. Pero además, un punto en que observan la incertidumbre económica instalada en la sociedad es en el tiempo con que reservan el lugar o el catering.
“Dos años atrás, los clientes hacían su reserva con 24 a 18 meses de anticipación. Actualmente es entre 12 a 5 meses”, remarcó.
Debido a las bajas contrataciones, los costos de los salones prácticamente se mantienen o en algunos casos subieron un poco por los importes indirectos que tiene la empresa como es el precio del generador, horas de limpieza y cualquier tipo de servicio que se realice o se contrate.
Acotar gastos
Bajar gastos parece ser la premisa de los clientes hoy antes de dar marcha atrás con la idea de realizar un evento. Según Mikyna, en un primer momento buscan un servicio de alto nivel pero luego, y con todos los gastos en mano, intentan bajar lo más posible.
Los artilugios para disminuir precios son diversos. Desde la Asociación de Salones, su presidente señaló que, por ejemplo, bajan la cantidad de personas a la cena y aumentan los invitados al baile ya que los valores en este último caso son mucho más bajos. “Esto delata la crisis de bolsillo que hay, ya que hace unos años atrás casi nadie invitaba a un casamiento al baile y hoy es moneda corriente”, remarcó Frugoni.
Además, frente a la premisa, algunos optan por realizar eventos en sitios que no estén a la vista. De esta forma, “buscan evadir impuestos y derechos como el IVA tanto del servicio de catering como de los anexos (música, decoración, fotografía). Así, también dejan de pagar los onerosos costos que tienen los derechos de Sadaic y AADI-CAPIF, lo que genera un ahorro muy importante”, sentenció Andrés Frugoni, quien subrayó que frente a esto, “lugares que están legalmente registrados deben competir con otros como fincas, bodegas y jardines que van copando lentamente el mercado y no son perseguido por los entes de control”.
En este sentido, los empresarios señalan que Sadaic y AADI -CAPIF han pasado a ser la mala palabra de los eventos ya que son muy altos y no hay forma de evitarlos. El primero de ellos cobra por categorización (tamaño y calidad) del salón y ronda entre $ 1.500 y $ 8.000 mientras que AADI-CAPIF cobra entre $ 20 y $ 40 por persona.
No obstante, indicaron que hay una ley que establece que Sadaic debería cobrar el 8 % del valor del cubierto descontando el valor del IVA y en caso de AADI-CAPIF el 4% pero no se cumple la metodología. “Los salones están categorizados y esto se torna injusto ya que si ponés música para 600 personas en una casa te cobran $ 1500 y si es en un salón de renombre $ 8000”, observó Frugoni.
Con el objetivo de acotar gastos, Cristián Mikyna, indicó que una de las opciones que se utilizan -de las cuales adelantó que no comparte ya que afecta el nivel del servicio- es disminuir la cantidad de personal o calidad de los alimentos.
Eugenia Brennan completó que el consumidor negocia con los distintos proveedores para lograr menores costos y buenos servicios, “investigan y piden más presupuestos, comparan opciones y reducen la cantidad de invitados”. Además, “se ha instaurado bajar el precio de la tarjeta por persona buscando opciones de catering más simples, acortando la duración del evento, muchos consultan por hacer un evento que empiece a las 22 con un brunch y fiesta, por ejemplo”.
Bajo este último punto, el socio de Lola Mora agregó que al reducirse cerca de 30% la cantidad de personas invitadas a un evento, uno de los perjudicados indirectos han sido los prestadores de servicios que también notaron una caída en su actividad. Brennan concordó con esta mirada y completó diciendo que muchas figuras han desaparecido como la del wedding planner o ambientador.
Asimismo, apuntó que antes en un evento social se contrataba bandas o shows, cotillón, carrito de golosinas, carrito de helado, etc. Hoy, todos estos lujos, para la gerente de Alma Multiespacio, se han dejado de lado.
Algunos precios
Evento social
Casamiento con bajo presupuesto: Incluye salón, catering, barra de bebidas, ambientación, disc jockey y fotografía. Costo aproximado de $ 350 o $ 450 por persona.
Casamiento con un presupuesto moderado: Incluye salón, catering, barra de bebidas, ambientación, disc jockey y fotografía. Costo aproximado de $ 550 o $ 650 por persona.
Evento Corporativo
Catering: Entre $60 y $120 dependiendo si sólo es coffee break o almuerzo.
Salón pequeño: $ 2.000.
Salón grande: $ 8.000.