02/03/2024
Después de 41 años, 3 meses y 18 días, cierra sus puertas definitivamente esta noche. Durante los últimos 21 años, he tenido el inmenso placer y honor de ser el DJ residente de las sesiones de fin de semana.
Comencé mi andadura en Sidecar en 2002, en una época donde la sala operaba con horario de bar, cerrando a las 3 de la mañana, y la cabina de DJ consistía en unos reproductores de CD no profesionales al final de la barra, sin visión directa a la pista. Desde el inicio, nos enfocamos en el público local, aquel apasionado por la faceta alternativa del pop, mezclando novedades con clásicos. Esta ha sido mi filosofía durante todos estos años, manteniendo la esencia de Sidecar en el corazón de una Barcelona cada vez más afectada por la gentrificación y la pérdida de su carácter cultural, donde el público local a menudo se ha sentido marginado.
En 2003, con la obtención de la licencia de discoteca, construimos una verdadera cabina en el corazón de la sala y lanzamos , dándole una identidad propia a nuestras sesiones de fin de semana. La música siempre fue el alma de nuestra fiesta, lejos de cualquier artificio. En aquellos primeros años, Etyam y yo, como DJs residentes, forjamos una identidad única para el club, reforzando la importancia de esta figura para crear una conexión real con nuestro público.
Ahora, mientras Sidecar prepara su transformación bajo una nueva marca y propuesta musical que no incluye mi estilo, me despido. Quiero expresar mi más profundo agradecimiento a todos mis compañeros, DJs, staff de la sala, y especialmente a nuestro público, por el apoyo recibido a lo largo de estos años. Espero que pronto nos encontremos compartiendo nuevos espacios y experiencias.
Esta noche, y yo nos uniremos para el último Dance To The Underground. Será nuestra despedida final de la sala. Si deseas decir adiós, esta es tu última oportunidad.
Apoyemos a los DJs locales. Nos vemos en los bares.