22/04/2024
En un rincón del mundo, donde el viento silba melodías de resistencia, vive Iuliana, una madre cuyo nombre lleva la esencia de su ser. Ella habita en un tiempo de hierro, en un lugar donde las sombras suelen ser más largas que la luz del día, pero en su corazón arde una llama que no conoce de inviernos.
Iuliana es madre de Iker, una pequeña estrella que ilumina sus grises días. Iker, nacido en el crisol de una prueba, mira el mundo con ojos de infinito asombro, sin saber que cada día es un acto de valentía para su madre.
Como un roble, Iuliana se enraíza en la tierra firme de su amor maternal, enfrentando cada desafío con la gracia de quien sabe que su lucha no es en vano. Ella teje esperanzas con hilos de paciencia, y en su regazo, Iker aprende a soñar.
Bajo el cielo estrellado, Iuliana le cuenta historias tejidas de constelaciones y coraje, donde las heroínas superan grandes tormentas, guiadas por la luz de su fortaleza interior. "Mira las estrellas, mi cielo," susurra Iuliana, "cada una es un corazón valiente que brilla a pesar de la oscuridad."
A veces, cuando el peso del mundo parece inquebrantable, Iuliana encuentra en el amanecer una promesa renovada. Es en estos momentos cuando susurra a su hijo: "Cada nuevo día es una página en blanco, Iker. Juntos escribiremos una hermosa historia, no de aquellas marcadas por la adversidad, sino por la alegría de superarla."
Y así, entre juegos y risas, pasan los días. Iker, ajeno a la magnitud de su mundo, sabe una cosa con certeza: el amor de su madre es un escudo invencible contra cualquier tempestad.
Iuliana, con cada sacrificio, enseña a su hijo la más valiosa de las lecciones: "En la fortaleza de tu espíritu, mi amor, reside la magia para cambiar el mundo. Y aunque este camino que recorremos es arduo, siempre será hermoso, porque lo recorremos juntos."
Y en el silencio que sigue al caer la noche, cuando Iker duerme serenamente,Iuliana mira hacia el cielo y sonríe, sabiendo que en el reflejo de las estrellas, se escribe la leyenda de su amor; un poema sin fin, un canto a la vida que desafía el tiempo. Ella, la madre que guarda el universo en su mirada, sigue adelante.