Mi nombre es Brenda Milet y soy fundadora de Litza Florería, un espacio dedicado a llevar lo mejor del mundo de las flores a las personas y ayudarles a celebrar sus momentos especiales con maravillosos arreglos florales.
Me gustaría compartir con ustedes cómo inició este proyecto maravilloso.
Siempre he estado enamorada de la naturaleza, me encantan los árboles, las plantas y las flores, pero no sabía qué tanto me gustaba hasta que me fui a estudiar a Monterrey.
Trabajando en una oficina como ingeniero en sistemas, me di cuenta de lo mucho que extrañaba el verde de Tabasco, de lo mucho que me hacía falta el olor a campo, la lluvia, los ríos, la comida y todas esas cosas que valoras cuando sales de tu pueblo. Tanta nostalgia me llevó a una crisis existencial en la que empecé a cuestionarme todo: ¿por qué elegí mi carrera?, ¿qué hacía viviendo en Monterrey? ¿realmente quería empezar una vida lejos de mi familia, de mi pueblo, de mis raíces?, ¿de verdad iba a poder vivir sin el queso fresco que tanto me gustaba?, y finalmente, me hice la pregunta correcta: ¿las computadoras me hacían tan feliz como la naturaleza? Mi respuesta fue NO.
Después de este viaje interior, decidí quemar mis barcos, renunciar a la que parecía una carrera muy prometedora y regresar a Tabasco para trabajar en lo más cercano que podía estar de la naturaleza: la empresa de mi familia que se dedicada a la agricultura.
Con todo mi enfoque y trabajo diario, la empresa de mi familia creció y mejoramos en todos los sentidos, y en muy poco tiempo, empezamos a exportar nuestro producto.
Sin embargo, a pesar de estar caminando hacia el rumbo que me había fijado, empecé a notar que, algo que no me gustaba, era el impacto ecológico que tenía nuestra empresa, no sólo porque de manera personal esta incómoda con nuestra huella de carbono, sino porque también estábamos experimentando todos los efectos del cambio climático: inundaciones, vientos, granizadas, sequías...
Al padecer los desastres naturales una y otra vez, empecé a cuestionarme todo de nuevo: nuestras prácticas agrícolas, nuestro crecimiento, mi forma de generar residuos y, nuevamente, y decidí que NO quería destruir la naturaleza, sino todo lo contrario, tenía que encontrar un equilibrio, hacer las cosas de manera diferente, dejar de tapar el sol con un dedo, asumir mi responsabilidad y empezar a revertir el daño ecológico que estábamos generando y seguir cuidando lo que tanto amaba: la naturaleza y los animales.
Fue entonces que, después de platicar con mi familia, se me ocurrió la grandiosa idea de hacer mi propio bosque. Aunque no fue fácil convencerlos para tomar responsabilidad de nuestra huella ecológica, después de algunos conflictos, hoy les comparto que nuestro bosque tiene 14 años, es un sueño hecho realidad.
Este bosque tropical, se convirtió en un enorme y hermoso jardín que hemos llenado a lo largo de los años también de flores tropicales, árboles frutales, follajes; es el hogar de abejas, mariposas, aves de diferentes especies, ardillas e insectos de muchas variedades... es un lugar lleno de amor, de respeto por la naturaleza, de paz, de tranquilidad y de armonía… pero lo más importante; es mi legado y esperanza para las nuevas generaciones y un llamado a que todos busquemos el "cómo sí se puede" y, desde nuestra trinchera personal, hagamos el cambio que este mundo necesita.
Con el correr de los años, me fui dando cuenta de que no todo era perfecto, que aunque el bosquecito iba creciendo y poblándose con fauna local poco a poco, también poco a poco fueron aumentando los costos, y el bosque ya no podía mantenerse solo, como cuando tus hijos están en la escuela y van avanzando, llegan a la universidad y ya no te salen las cuentas… ¡Así se sintió!
Tomé el nuevo reto y empecé a buscar opciones y a enfocarme en como hacerle para que el bosque fuese autosuficiente: ¿qué acciones tomar para hacerlo rentable y mantenerlo?, ¿qué acciones tomar para conservarlo?, ¿cómo hacerle para compartir con las personas la experiencia de paz, armonía y tranquilidad que tienes cuando estás rodeada de árboles, plantas y flores?
Fue entonces cuando empecé a trabajar con las flores y su universo particular: empecé a buscar mercados para vender las flores tropicales que teníamos. Desafortunadamente no fue tan sencillo encontrar mercados y posicionar el producto, y después de regalar muchas muestras y de pagar unos buenos pesos en paquetería, decidí dar un paso más en la cadena y entregarlo a los consumidores finales.
Empecé a capacitarme en diseño floral y, desde hace 4 años, gracias a diferentes mentoras nacionales e internacionales que me han ayudaron a desarrollar la habilidad de convertir las flores en arte, he podido crear Litza Florería y todo el concepto que, hoy, puedo entregarte como una experiencia e-commerce a tu servicio para alegrar tu vida y la de tus seres queridos con las más hermosas flores de Tabasco, de México y del mundo.
Toda la magia empezó un 14 de febrero en el que decidí empezar a vender mis arreglos florales entre mis amigos y familiares; a muchos de ellos se los entregué personalmente y me encantó la respuesta de la gente, entregar de primera mano una muestra de amor de una persona a otra a través de una de las creaciones más maravillosas y bellas de la naturaleza: las flores. ¡Ver la sonrisa en sus caras hizo un parteaguas a en mi vida!
Encontré mi pasión y una misión maravillosa: compartir la naturaleza con la mayor cantidad de personas posibles, llenar sus vidas de experiencias de armonía, belleza y tranquilidad a través de las flores y, lo mejor de todo, ayudar a las personas a conectar con emociones de amor, gratitud, afecto y felicidad.
Por eso, crear Litza Florería ha sido el proyecto más hermoso de mi vida, porque me ha permitido compartir con ustedes esas emociones que conectan y resuenan conmigo y mi misión de vida y lo que, personalmente, ha significado tener un hermoso y enorme jardín lleno de flores y árboles exóticos y maravillosos.
Litza me ha dado la oportunidad de impactar en las personas a través de lo más bello de la naturaleza: las flores, y lo más hermoso que una persona guarda en su corazón: su amor. Más que arreglos florales, hacemos llegar el afecto de nuestros clientes a las personas especiales en sus vidas, al mismo tiempo que compartimos nuestro amor por la naturaleza, alegrando su vista y olfato con hermosas flores.
Desde hace 4 años hemos estado presentes en los momentos especiales de nuestros clientes: cumpleaños, aniversarios, graduaciones, bautizos, pedidas de mano, bodas, XV, conferencias, regalos navideños, posadas, baby shower, primeras comuniones, nacimientos, en el aeropuerto dando la bienvenida, etc, etc, etc.
Para nosotros es un honor ser parte de los grandes momentos de la vida de nuestros clientes ¿Te gustaría formar parte de esta maravillosa comunidad? Contáctanos +52-932-105-3764; estamos para servirte.