14/02/2025
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Voting until 02-17-2025
Greetings! Honored to be nominated for the, Mujer HBA 2025.
Hispanic Business Association (HBA)
Es un honor ser nominada este año por el Hispanic Business Association (HBA) Mujer HBA 2025.
Los votos sirven, gracias de antemano a los que me regalen su like 🙂
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🌟 Candidata a Mujer HBA 2025 🌟
Con orgullo presentamos a CAROLINA MASCARIN, una de las nominadas para el reconocimiento de Mujer HBA 2025. Su trayectoria, esfuerzo y dedicación han dejado huella en nuestra comunidad.
📖 Conoce más sobre ella:
En el verano del 2024 se estrenó Lee, película protagonizada por Kate Winslet que narra la
historia de Lee Miller, una corresponsal de guerra en el periodo de la segunda guerra mundial,
ella junto con otro corresponsal fueron los primeros fotógrafos en entrar al campo de
concentración Dachau, a unas millas de Munich. Las imágenes que Miller capturó durante este
periodo documentaron la brutalidad que vivieron millones durante la guerra. Confieso que mi
interés por la cinta fue basada en el aporte de la protagonista a la fotografía; gracias al internet
profundicé sobre su trayectoria; quedé admirada cuando supe que además de haber sido
fotógrafa y corresponsal de guerra, Miller fue modelo en la década de 1920, posteriormente
trabajó como fotógrafa de moda y bellas artes y años después de la guerra se interesó por la
cocina, Miller se reinventó nuevamente y se convirtió en chef.
Inició esta autobiografía con Lee, porque como ella, la vida es una reinversión constante que
nos lleva a planos y experiencias que nos invitan a transformarnos, descubrir nuevos intereses y
pasiones de acuerdo con el contexto en que vivamos.
Así me he reinventado:
30 años después de que se tomara la primera fotografía de la tierra desde el espacio, 25 años
después de que las mujeres tuvieran el derecho al voto en Colombia y 10 años después de que
el hombre llegara a la luna, tome mi primer respiro de oxígeno, el año 1979, locación, Bogotá,
Colombia. Decidí llegar al mundo el día que mis papas cumplían un año de casados, de acuerdo
al relato de mi Chatica (mi hermosa madre) llegue al mundo rápido, antes de que el reloj diera
la medianoche del domingo, yo no me quería perder la fiesta de amor de mis papas. Mi
nombre: Ana Carolina Angel Diaz. Ana, por mi abuela paterna, uno de los seres humanos que
más ha influido en mi vida y Carolina… bueno por Carolina de Mónaco quien estaba de moda y
así lo confirman los miles de nombres similares de colombianas de mi generación.
Mi vida en Colombia ha sido el ancla permanente al bote de mi vida, la vida en Estados Unidos
la brújula. La primera vez que visité este país, que finalmente me acogió fue a los 9 años, lo
imaginé como propio y soñé con vivir aquí en el norte desde entonces.
Llegué con una maleta en el 2002, después de graduarme como periodista gracias a un
intercambio estudiantil en New Hampshire; al concluirlo una tía con la que siempre estaré
inmensamente agradecida, me conectó con un periódico en Myrtle Beach, Carolina del Sur. La
conexión no se dio, pero otras oportunidades se abrieron y es así como llegó a Charleston (Dios
trabaja derecho por caminos torcidos, dice mi papá).
Cabe añadir que en esta aventura Charleston me ha acompañado, Edgar, mi papá. Es imposible
contar esta etapa de mi vida sin incluirlo. Desde los planos levantamos el canal local de Azteca
América. Éramos reporteros, editores, productores, presentadores, camarógrafos, en fin, dos
personas para un canal; lo único que no hacíamos era vender publicidad, eso les tocaba a otros
que casi no veíamos; uno de los vendedores, el más “antipático” de todos, se robó mi corazón,
mi nombre hace la transición de Carolina Ángel a Carolina Mascarin. Después de tres hijos y 20
años de casados, le doy las gracias a Dios por poner a Jamie, el portador del apellido de
transición en mi vida.
Matteo llegó el mismo año de nuestro matrimonio, Jacob dos años después; ahora tenía a dos
hermosos e incansables críos. La vida dio una vuelta abrupta en el 2008 cuando con la recesión
perdí mi trabajo en Azteca América, me convertí en ama de casa de tiempo completo, sin
embargo los ingresos eran necesarios y a mi papa se le ocurrió la idea de ofrecer servicios de
video y fotografía para eventos, así nació Both Markets Communications LLC, que después se
convertiría en lo que es hoy Angel Mascarin LLC.
Mi experiencia como periodista me ayudó a hacer una nueva transición: de documentar y
reportar eventos frente a la cámara pase a documentar la vida detrás de una y capturar las
alegrías y momentos especiales de otros.
Siempre he amado la fotografía, mi amor por este arte, sin saberlo, inicio cuando mi tío Mauro
quien tenía un laboratorio de fotografía en la parte trasera de la casa de mis abuelitos, al lado
del árbol donde colgaba el columpio en el que nos balanceábamos con mis hermanas, dejaba
abierta la puerta para que entrara el aire. Entraba a escondidas a ver las hojas colgadas con
imágenes que aparecían misteriosamente en el papel mojado. Varios años después en la
universidad, Mauro me prestó la primera cámara Canon que cayó en mis manos. Aquí en
Charleston renació mi amorosa pasión por la fotografía.
Necesitábamos con Jaime más ingresos y se abrió una oportunidad para una consejera de
vivienda bilingüe en el Charleston Trident Urban League, afiliada local del National Urban
League, organización con más de cien años de lucha buscando la igualdad y defendiendo los
derechos civiles. Aquí me he puesto “en los zapatos del otro” he visto a los ojos la
discriminación, la injusticia y el hambre con que viven miles en este país
Mi cámara me ha permitido capturar alegrías los fines de semana, mi trabajo en el Urban
League me ha permitido abogar por los que no tienen voz, cada uno de estos dos trabajos me
ha ayudado mirar el mundo de una forma diferente. Capturar las lágrimas de alegría de unos
padres durante la celebración de su hija quinceañera. Detener en el tiempo la mano nerviosa
del novio sosteniendo la de su futura esposa, acompañar al inmigrante que tiene miedo de
reportar discriminación de vivienda por temor a ser deportado, orientar al padre que está
siendo desalojado de su vivienda porque no alcanzo este mes para la renta, ver que hasta en
este país hay niños que se acuestan con hambre, porque en muchas oportunidades una madre
soltera debe escoger entre pagar la electricidad o comprar comida para sus hijos.
Cuando me había olvidado de cómo poner pañales, en el 2015, un nuevo tránsito con la llegada
de Lucas, entonces reafirmé mi convicción de ser madre.
Continúo vinculada al Charleston Urban League, la lucha por la equidad de vivienda seguirá en
la agenda nacional y la cámara se ha vuelto una extensión de mi ser, porque ahora utilizo mi
lente además de las bodas y quinceañeras, para documentar como voluntaria los eventos de
Make a Wish Foundation, Family Connections y más recientemente bebés prematuros en
MUSC. Sin lugar a duda las imágenes visibilizan las realidades ocultas a nuestros ojos.
Ser lo que soy es la recopilación de lo que otros han aportado a mi existencia, mis padres me
dieron el papel y lápiz con las direcciones del proyecto, a ellos les debo todo; mis hermanas me
ayudaron a escribir los primeros capítulos, podrían editarlos porque conocen todos los secretos
de mi historia; de mis abuelitas aprendí que los capítulos pasados sirven, para que los que están
por escribirse sean mejores. Escribiré a mi esposo el párrafo del eterno de amor, le agradezco
ser la constante de mis verdades y su generosidad de corazón, mis hijos son el clímax de mi
historia, a ellos amor infinito.
“Vale la pena volver a empezar una y mil veces mientras uno está vivo” Escribió Gabo, él me
enamoró a una corta edad con sus letras, porque reinventarse nunca pasará de moda.
✨ ¿Qué opinas de su historia? Déjanos tu comentario y apoya a las mujeres que inspir
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